Quién es:
Este árbol es conocido, entre otros nombres, como nogal alado, llamado así porque sus frutos poseen unas alas a su alrededor; pertenece a la misma familia que el nogal (el árbol de las nueces). Es originario de la región del Cáucaso y noroeste de Persia.
Cómo es:
Árbol caducifolio de porte mediano (25 m de altura media). De corteza gris, con grietas muy profundas. Posee hojas compuestas de siete o más pares de foliolos enfrentados. Florece durante la primavera y desarrolla sus frutos durante el verano; estos son pequeños, rodeados por un ala circular de unos 2 cms, dispuestos en racimos colgantes de hasta 45 cms de largo.
Qué le gusta:
El terreno plano o las laderas poco profundas. Le gustan los veranos húmedos y templados y los inviernos suaves.
Qué odia:
Las exposiciones umbrías.
En qué suelo le gusta vivir:
En los que son húmedos, profundos y bien drenados. Si dispone de estas condiciones, desarrolla un extenso sistema radicular.
Y en el jardín:
Necesita en general grandes espacios. Donde mejor se desarrolla es en parques amplios y en terrizo, sirviendo en este caso como árbol de sombra. Su predisposición a los rebrotes no lo hace convenientes para su uso sobre céspedes.
Algo curioso:
Su madera es ligera y blanda, y se emplea para la fabricación de cerillas y calzado.